Esta semana se disputó en la localidad mallorquina de Inca el Rallye
Dijous Bo
diez tramos disputados a los mandos del Seat Ibiza Kit Car.
La gran amenaza de la lluvia no se hizo real aunque la humedad fue el factor clave en tramos como Pollença-Lluc y Lluc-Cuber, con importantes consecuencias para los pilotos. Con Dani Lozano claramente destacado, la lucha se centró en la segunda plaza por la que pugnaban los hermanos Martorell y Carlos Pérez-Mateo Figuera. Con este resultado el título regional se decidirá en la última carrera prevista para el 26 de este mes, entre Lozano y Pérez.
La primera sección estuvo dominada por Lozano, que se anotó cinco scratchs por uno solo de Martorell, sacando una importante ventaja de 32 segundos y sentenciando prácticamente el rally. Tras Martorell y Pérez se colocaba Antonio Amer, beneficiado por el abandono de Julián Gómez por problemas mecánicos. Otras bajas destacadas fueron las de Jaime Riera por avería mecánica y Lucas Laville y Francisco Jiménez por salida de carretera.
La segunda sección era a priori la más interesante, con el esperado tramo Lluc-Cúber bañado por una fina capa de humedad y la bajada del Puig Major en bajada. Lozano-Hensen no arriesgaron y se dedicaron a administrar su ventaja. No hubo sorpresas y finalmente la pareja subió a lo más alto del podio de Inca, en la jornada previa a las fiestas de la localidad y en mitad de un ambiente muy animado con aficionados llegados de todos los puntos de la isla.